Evangelio del día 9 de Diciembre de 2025.

Mateo 18, 12-14

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «¿Qué os parece? Suponed que un hombre tiene cien ovejas: si una se le pierde, ¿no deja las noventa y nueve en el monte y va en busca de la perdida? Y si la encuentra, en verdad os digo que se alegra más por ella que por las noventa y nueve que no se habían extraviado. Igualmente, no es voluntad de vuestro Padre que está en el cielo que se pierda ni uno de estos pequeños».

Hoy nos fijamos en la frase:

            “va en busca de la perdida”

En varios evangelios se nos habla del Buen Pastor y del cuidado de las ovejas. Sabemos que Dios es el Buen Pastor y nosotros las ovejas.

En ocasiones nos encontramos perdidos, desanimados o desesperados; nuestra fe flaquea y a veces no queremos tampoco dejarnos encontrar por Dios.

Hoy se nos dice que Dios siempre sale a nuestro encuentro, no importa que podamos rechazarle, Él siempre está buscándonos, entregándonos su amor y su perdón. Nunca abandona a ninguna de sus criaturas, no quiere que nadie se pierda.

Cuando recupera a alguna de esas ovejas, la alegría es grande en el cielo. Dios Padre, no quiere que ninguno de nosotros que somos sus pequeños podamos extraviarnos, por eso siempre está ahí con la mano tendida, con el corazón dispuesto a acogernos de nuevo, a recibirnos y perdonarnos.

Señor, aunque en ocasiones seamos ovejas perdidas, queremos que cuando salgas a nuestro encuentro, no negarnos al encuentro de nuevo contigo.

Adorado sea el Santísimo Sacramento.

Sea por siempre Bendito y Alabado.                                               FVR.